Marlaska viste a los guardias civiles de Tráfico con chaquetas de protecciones caducadas hace años

El Ministerio del Interior ha colado los guardias civiles de la Agrupación de Tráfico chaquetas y protecciones que llevan años caducadas. Han sido los propios agentes de la Guardia Civil quienes se han dado cuenta de que los números de serie de sus prendas, recién recibidas, muestran que fueron fabricadas en 2010. El fabricante, señalan, deja claro en sus fichas que a partir de los 10 años deben renovarse o perderán buena parte de sus cualidades protectoras. La Asociación Unificada de la Guardia Civil ya ha presentado una denuncia.

Las chaquetas que utilizan los guardias civiles de tráfico caducan. Más que las chaquetas, las protecciones que llevan ocultas y que les resguardan ante caídas o atropellos en zonas sensibles como la espalda, hombros o codos. Así lo han atestiguado agentes canarios que han revisado algunas de las últimas entregas, pero la situación se produce en unidades de toda España.

El hecho, dicen, es más preocupante si se tienen en cuenta los datos de siniestralidad entre agentes de estas unidades, que pasan su jornada en las carreteras españolas: el año 2023 se produjeron un total de 124 accidentes en motocicleta (por el personal de la agrupación) y, en lo que va de 2024 se han producido 104.

El asunto ha llegado directamente a la Dirección General de Tráfico a través de una denuncia de la  Asociación Unificada de Guardias Civiles (AUGC), que lo califica de «negligencia»  en la gestión de los uniformes de los motoristas de la Agrupación de Tráfico.

En su denuncia, destacan el «grave riesgo para la integridad física» de los agentes, ya que se detectó el uso de protecciones caducadas en los trajes que les han sido entregados y estos utilizan en su labor diaria.

Denuncia a la DGT

Según la AUGC, el problema se originó el 3 de septiembre de 2024, cuando su representación en Canarias descubrió que varios motoristas de la Guardia Civil en diversas islas del archipiélago habían recibido uniformes adquiridos en 2010, bajo el expediente 0100DGT16568. Dichos uniformes contenían protecciones cuya vida útil, según el fabricante, era de diez años, lo que implicaba que ya habían caducado.

El sindicato informó de estos hechos a la Oficina de Riesgos Laborales, que el 24 de septiembre de 2024 respondió citando una normativa derogada en 2018, argumentando que las protecciones no tenían caducidad. La AUGC calificó esta respuesta como una muestra de desprecio por la seguridad de los motoristas, criticando la falta de rigor al ignorar tanto la normativa actual como las advertencias del fabricante.

La AUGC exigió la retirada y sustitución inmediata de las protecciones defectuosas, advirtiendo sobre las graves consecuencias legales que este incumplimiento podría acarrear para los responsables. Para la asociación, es inaceptable que la vida de los agentes se ponga en riesgo utilizando material de protección caducado, que podría fallar en caso de un accidente.

Además, los agentes de las Agrupaciones de Tráfico de la Guardia Civil se han hartado del estado de la flota de motocicletas con las que tienen que realizar su trabajo: chasis oxidados y próximos a la rotura, motores que rondan los 200.000 kilómetros o frenos que ya apenas funcionan. Los agentes reclaman al Ministerio del Interior que se deje «de motos camufladas y radares de tramo» en busca de multas y de aumentar la recaudación, y, en cambio, se dedique arreglar este problema.

Las imágenes que difunden los propios agentes del estado de las motos hablan por sí solas: amortiguadores carcomidos por el óxido y frenos agotados, lo que supone un «peligro, ya que afecta a la estabilidad». «El mantenimiento es lamentable», aseguran. Además, la flota ya alcanza una cantidad de kilómetros acumulados «que asusta», dicen: hay motos que rondan los 200.000 kilómetros, «que para un coche sería como medio millón de kilómetros».

Por ello, piden a Interior y al director General de Tráfico que se dejen «de motos camufladas y radares de tramo», dos de las herramientas que más se están utilizando en la actualidad y que suponen un aumento de la recaudación, y que se fije como prioridad dar medios a los agentes para hacer su trabajo en condiciones dignas y seguras.